Pese al anuncio de aumento, aún hay focos de protesta de la Bonaerense en varios municipios

El Gobierno de Axel Kicillof adelantó que habrá mejoras salariales, pero continúan los reclamos.

Pese a que el Gobierno anticipó a primera hora de la mañana que habrá mejoras salariales para la Policía bonaerense, las protestas de los efectivos continuaban en varios puntos de la provincia de Buenos Aires.

Este martes, continuaban las protestas en el comando de Patrullas de La Plata (526, entre 21 y 22), con patrulleros estacionados en las veredas y familiares haciendo batucadas. Lo mismo ocurría en los comandos de Pilar, Avellaneda, Merlo, San Martín y Tres de Febrero, según se replica en redes sociales.

Asimismo, una caravana de treinta patrulleros salió esta mañana del Comando de Patrulla de San Martín, pasó por Hurlingham, siguió por Morón e iba rumbo a Puente 12, en La Matanza.

Cabe señalar que ayer, a partir de una convocatoria en las redes sociales, las protestas iniciaron a la tarde en varios municipios del interior y del conurbano. En tanto, el epicentro de las protestas estuvo en las puertas de la residencia donde el gobernador Axel Kicillof vive con su familia en La Plata. Ahí se congregaron efectivos, que realizaron una fogata en la entrada y realizaron un “sirenazo” con patrulleros hasta pasada la medianoche.

Muy temprano esta mañana, el jefe de Gabinete bonaerense, Carlos Bianco, anunció junto al ministro de Seguridad, Sergio Berni, que el fin de semana se conocerían detalles de la mejora salarial que alcanzará a los 90 mil integrantes de la mayor fuerza civil armada del país. Fue en una conferencia urgente que se hizo en Autopista Riccheri y Camino de Cintura.

Bianco y Berni explicaron que los agentes tienen “un retraso del 30%”. Y que la posibilidad de la mejora se estudia en los despachos oficiales desde “hace 10 días”.

No obstante, las protestas policiales nunca cesaron en Espora y diagonal Brown, de Adrogué, donde comenzó la protesta. Y continuaban este mediodía, aunque no con la misma intensidad que anoche.

“La situación de los policías es malísima, en cuanto a la situación económica y las condiciones de trabajo. La pandemia lo que hizo fue agravar la situación”, aseguró esta mañana Nicolás Masi, secretario general de SIPOBA, una organización civil que pretende ser un gremio, aunque la sindicalización policial está prohibida.

El policía quiere saber cuánto va a cobrar a fin de mes. Nosotros pedimos 60 mil pesos de sueldo de bolsillo para oficial ingresante”, dijo en declaraciones a Radio Mitre.

El último ajuste en los haberes para uniformados rige desde noviembre de 2019. Entre los reclamos que dejaron trascender los policías están un aumento del 64% para el subescalafón Admministrativo Técnico Profesional, aumento de las horas extras conocidas como “horas cores”, que no haya represalias y sanciones para el personal que concurra a alguna de las protestas, pago del servicio de policía adicional en tiempo y forma, ya que cobran hasta con 120 días de atraso, provisión de uniforme y equipo de trabajo y aumento del decreto 1315 (mantenimiento de uniforme) a $ 3.800, planes de vivienda para el personal policial y no tener como obra social obligatoria a IOMA. (DIB) MCH

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